APOYO EMOCIONAL: ¿EN QUÉ CONSISTE?

Una duda muy común que nos puede surgir es cómo ayudar a las personas de nuestro alrededor qué están pasando por un momento difícil. ¿Debo estar pendiente todos los días? ¿Qué le tengo que decir? ¿Le pregunto cómo está o intento cambiar de tema? Si se pone a llorar, ¿Qué hago? Estas y muchas otras son preguntas muy comunes a la hora de ver a una persona cercana pasar por un mal momento.

Cuando hablamos de apoyo emocional, hablamos de estar acompañando a esa persona en el proceso de enfrentarse a ese mal momento. En este camino de apoyo, no hay un manual de instrucciones. La única regla es: no se trata de resolverle el problema, y sobretodo, tener claro que no se trata de hacernos responsables de que la persona que tenemos delante deje de estar triste o resuelva sus problemas.

Cada persona va a necesitar cosas diferentes cada día. Un día necesitará hablar del tema que le preocupa, desahogarse, llorar. Ese será el momento de simplemente escuchar, estar ahí, entender y empatizar con su malestar. En cambio, otro día necesitará hablar de otros temas, distraerse y no estar pensando en la fuente de malestar. También es posible que haya días que la persona necesite estar a solas y tener su espacio. Entonces, respétalo.

Ahora bien, ¿Cómo sabemos qué necesita? No somos adivinos y no vamos a poder saber siempre lo que necesitar la otra persona. Por tanto, pregunta: ¿Qué necesitas?

Por otro lado, es importante que no dejes de escuchar tus propias necesidades, no te olvides de ti mismo en el proceso de apoyar a los demás. Eres un apoyo, no un paracaídas. No tienes que estar siempre. Tienes derecho a marcar tus límites.

Ana Rodríguez Guerrero.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Time limit is exhausted. Please reload CAPTCHA.