La tendinitis del músculo braquial es una lesión que se da comunmente en escaladores, y de ahí que se conozca a veces por codo del escalador. Aunque se puede dar en cualquier persona. Es diferente (y menos común) que la epicondilitis (o codo de tenista) o la epitrocleitis (codo de golfista).
Hoy explicamos los síntomas, las causas y cómo tratarlo.
Síntomas.
El músculo braquial es un músculo debajo del biceps y va del hombro al codo (empieza en el húmero y se inserta en el cúbito). Es el encargado de la flexión del codo.
El dolor de la lesión es gradual. Se caracteriza por un dolor profundo en la inserción del braquial, correspondiente a la parte anterior del codo. Es un dolor más profundo que el del codo del tenista o del golfista.
Puede producir incapacidad de flexionar el codo e hinchazón del mismo.
¿Por qué ocurre?
Como cualquier tendinitis se debe a una carga excesiva. En este caso por hiperextensiones, por contracciones súbitas o por tener el codo flexionado demasiado tiempo. Normalmente esto ocurre en entrenamientos excesivos de deportes o actividades que impliquen estas contracciones o hiperextensiones (como la escalada).
Tratamiento.
Hay que tener en cuenta que las lesiones de codo son complicadas y llevan tiempo.
Inicialmente se recomienda reposo activo, tratamientos con frío y posiblemente antiinflamatorios. Poco a poco (tras 2-4 semanas) podemos ir introduciendo estiramientos no dolorosos y manipulaciones por fisioterapeutas. Poco a poco iremos introduciendo ejercicios (en este orden):
- Isométricos.
- Excéntricos de bíceps con pulgar hacia el techo.
- Ejercicios concéntricos de bíceps.
En caso de ruptura total necesitaríamos cirugía. En caso de ruptura parcial o desgarro necesitaríamos reposo y tenerlo elevado, hielo y vendajes de compresión.
Cómo evitar la lesión.
Para evitar el codo de escalador es importante calentar bien antes de entrenar, reposar debidamente entre lesiones, fortalecer la zona con ejercicios correctos (consulta a tu fisioterapeuta) y cuidar la técnica al escalar.