Escoliosis: tratamiento con fisioterapia y osteopatía

La escoliosis es una desviación de la columna en los tres planos del espacio. Todos nosotros tenemos una ligera asimetría, pero lo importante es el grado de la misma, y si el cuerpo es capaz de compensarla o no. Si no puede compensarla, aparecerán dolencias y lesiones.

¿Pueden ayudar la fisioterapia y osteopatía a los pacientes con escoliosis? Depende del grado de escoliosis, la edad del paciente y lo que se requiera.

Es importante diferenciar entre escoliosis funcionales y estructurales. Si a alguien le duele un lado de la espalda, puede producir una escoliosis (funcional) para mitigar el dolor. Una vez tratado el origen, ésta puede desaparecer.  Las estructurales (que en algún momento fueron funcionales) son más difíciles de eliminar porque forman parte ya de la estructura corporal.

Las escoliosis pueden corregirse durante las etapas de crecimiento: infancia y adolescencia. Por eso muchas veces se realizan análisis de la columna en los colegios. Durante ese periodo, hay muchas técnicas para corregir el problema, la mayoría basadas en terapias posturales, corsés, ejercicios y estiramientos. Ahí, un osteópata puede ayudar aconsejando sobre esa higiene postural, realizando un seguimiento y un apoyo al paciente.

En la edad adulta la escoliosis sólo puede corregirse con cirujia (con la consiguiente rehabilitación).

Eso si, podemos liberar tensiones, evitar que empeoren e incluso mejorar su estado. La escoliosis produce diversas lesiones al intentar compensar el cuerpo esa desviación, o al recibir ciertas partes del cuerpo demasiada carga. En esos casos, tanto el osteópata como el fisioterapeuta pueden ayudar a relajar, liberar y corregir dichas lesiones.

No se conocen muy bien las causas de todas las escoliosis. Parece ser claro que en caso de acortamiento de uno de los miembros inferiores, la columna se inclina hacia el lado de la pierna más corta (escoliosis compensatoria). También algunas se originan en el cráneo , en pacientes con problemas en el parto o daños craneales.

La escoliosis se divide en tres tipos:

– Escoliosis leve, (-25º)
– Escoliosis mediana, (25 a 50º)
– Escoliosis grave, (+50º)

Síntomas.

  • Hombros a distintas alturas,
  • Cadera elevada
  • Cajas torácicas a distintas alturas
  • Cabeza no centrada directamente sobre la pelvis
  • Apoyo del cuerpo hacia un lado.

En escoliosis medianas o leves se recomienda realizar deporte. En todas, es muy recomendable acudir a un especialista, ya sea un osteópata o un fisioterapeuta.

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